Arbitrajes: ¿Buenos o malos?, es lo que hay

          Los árbitros fallan. Son humanos. Hasta ahí  -espero que- todos de acuerdo. Pero también son malos, prepotentes y con sed de pretender ser imprescindibles. El hecho de ser la autoridad sobre el campo,no quiere decir que tengan que tratar a los futbolistas como inferiores, que les tengan que tratar de  usted, no se les pueda tocar...

         Quede como ejemplo el arbitraje en el Bernabéu contra el Sevilla, en el que el "referí" sacaba las tarjetas aprovechando que tenía la mano en alto y que le gustaba dar vueltas sobre sí mismo, años de ballet supongo, sin olvidar la "genial" expulsión de Juanfran en el mismo estadio la temporada `pasada, cuando le hicieron dos penaltis y se llevó una tarjeta por "simular" cada uno de ellos, cosas que pasan si eres de la cantera y cuando vuelves a la que fue tu casa se te ocurre jugar bien (medidas tomadas en la casa blanca desde el caso Eto´o).

          No les exigo que acierten todos los fueras de juego, hay muchos que son justísimos y en el bar hacen falta dos repeticiones y seguimos sin ponernos de acuerdo, pero hay otros que son por metros, esos sí les exigo que los vean y  los piten. Si se tiene un criterio para sacar las amarillas, que lo aplique e incluso lo varíe según los lances del juego, pero lo que no puede ser es que no se olviden de sacar una tarjeta por quitarse la camiseta o continuar una jugada y patadas, codazos y agresiones que quedan completamente impunes.
         
           Entiéndanme, si el partido empieza suave y se endurece a partir de cierto momento, completamente de acuerdo en que también se endurezca el criterio, pero no entiendo que se haga sacando tarjetas por patadas brutales que por sacar una falta antes de que pite el árbitro. 


          En el Sevilla - Barça, de esta segunda vuelta, se anuló un gol a Messi por falta de Busquets. Cierto es que había habido falta, pero antes de que se pusiera el balón en juego el árbitro se acercó a ambos jugadores advirtiéndoles, y posteriormente permitió el saque, en el no hay falta en absoluto, por lo que parece que el árbitro había decidido antes de sacar la falta que penalizaría al catalán. Increíble.


            El Valencia se pasó tanto la semana previa como la posterior, quejándose de los arbitrajes sufridos en el coliseo blanco, pero la semana siguiente ganaron en Mestalla con arbitraje "raro" con gol en clamoroso fuera de juego de Mata (clamoroso de 3 metros), y entonces callaron- el partido siguiente volvieron a ganar con gol en fuera de juego de Mata-, pero claro, Luis García no es tan pesado y cansino, por lo que se limitó a una declaraciones tras el partido sin volver más al tema, y al igual que él lo hizo el resto del club perico, por lo que la prensa no les dio tanto bombo.


          Como estos hay mil ejemplos a favor y en contra de cada equipo, quizás más para unos que para otros, y es que también es normal que si existen 15 forcejeos durante un partido dentro del área de un mismo equipo es más probable que se le pite un penalti,  que si éste mismo equipo llega al área 3 veces en 90 minutos. Lo mismo ocurre si se pasa defendiendo todo el partido y entrando a ras de césped cada jugada, se le pitarán más faltas, y a eso hay que unirle que el trío arbitral no acertará siempre. Pero lo que no se puede hacer es dudar de la honestidad de los arbitrajes, porque si creemos que existe una corriente intencionada de arbitrajes a favor de unjo u otro equipo, apaga y nos vamos, porque entonces no tienen sentido que sigamos viendo y disfrutando con La liga.